En general, el clima de Palestina es seco y cálido, salvo en los meses fríos de enero a marzo, cuando son frecuentes las lluvias y las tormentas. El verano dura desde mediados de mayo hasta mediados de octubre, aunque las temperaturas no suelen subir a más de 36 grados. Los meses templados son marzo, abril, octubre y noviembre, en los que la temperatura durante el día puede ser de entre 22 y 26 grados y a la noche baja a unos 14-15.

                Jericó, la ciudad más profunda del mundo (250 metros bajo el nivel del mar), es un caso aparte: allí la temperatura siempre suma entre 7 y 10 grados más que en el resto de Cisjordania, calor que se intensifica con la humedad del vecino Mar Muerto.